Pruébalo antes de juzgar

José M. Alarcón
José M. Alarcón
Gallego de Vigo, amante de la ciencia, la tecnología, la sociología, la música y la lectura. Ingeniero industrial y empresario. Fundador de Krasis, especialistas en e-learning. Autor de varios libros y cientos de artículos.
Pruébalo antes de juzgar

Humpty Dumpty es uno de los personajes más célebres del personal mundo de Lewis Carroll. Es el huevo con patas y manos que, sentado en precario equilibrio en un muro, habla con Alicia en el capítulo 6 de "A través del Espejo", y que últimamente la industria de Hollywood ha desnaturalizado por completo al sacarlo en "El gato con botas".

Humpty-Dumpty con libro

El personaje es famoso por su aspecto, por definir en un párrafo memorable el significado de una palabra como "quiere decir lo que yo quiero que diga" (el párrafo completo tiene mucho trasfondo), por acuñar el término "portmanteau" para el inglés*, y por sufrir prosopagnosia o incapacidad para reconocer los rostros de otras personas. Lástima que no tuviese mejor equilibrio 😉

Precisamente a partir de ese problema neurológico se gesta un párrafo que me parece genial, y que tenía anotado esperando a una ocasión especial para usarlo:

-No creo que te reconozca ya más, ni aunque nos volviéramos a ver -replicó Humpty Dumpty con tono malhumorado, concediéndole un dedo para que se lo estrechara de despedida -Eres tan exactamente igual a todos los demás…   -Por lo general, se distingue una por la cara -señaló Alicia pensativa.   -De eso es precisamente de lo que me quejo -rezongó Humpty Dumpty -Tu cara es idéntica a la de los demás…, ahí, un par de ojos… (señalando su lugar en el aire con el pulgar), la nariz, en el medio, la boca debajo. Siempre igual. En cambio, si tuvieras los dos ojos del mismo lado de la cara, por ejemplo…, o la boca en la frente…, eso sí que sería diferente.   -Eso no quedaría bien -objetó Alicia. Pero Humpty Dumpty sólo cerró los ojos y respondió: -Pruébalo antes de juzgar.

Hoy es día 1 del año 2013. Hace dos años este mismo día escribí que la crisis ya no es crisis, es la nueva realidad. El año pasado, también el día 1, hablé de que tenemos que convertirnos en artesanos del conocimiento, empaquetar lo que sabemos hacer y buscarnos la vida para progresar. Hoy lo que quiero decir es que es hora de cambiar de verdad, de hacer cosas locas y diferentes, y sobre todo probarlo antes de juzgar.

Einstein decía que locura es hacer lo mismo una vez tras otra y esperar resultados diferentes. También decía que "Cualquiera que nunca haya cometido un error es que no ha intentado nunca hacer algo nuevo".

Llevamos años haciendo las cosas exactamente igual: en la política, en la sociedad, en nuestros trabajos y nuestras empresas… Y está claro que no ha funcionado.

Mi reflexión y propósito personal para hoy es tratar de pensar en cosas diferentes, algunas incluso un poco locas (dentro de un orden), e ir madurándolas y probándolas a lo largo de los próximos meses. Pequeñas costumbres de cada día, actitudes con otras personas, pero también otras acciones de mayor calado si podemos. Modificar un poco, en definitiva, nuestra forma de actuar.

Si mucha gente lo hace quizá se podría conseguir algo entre todos, y dentro de exactamente un año mi reflexión tomaría un cariz más positivo 😃

¡Así sea!

* Portmanteau es una palabra extraordinaria, que demuestra el genio de Carroll. Es el equivalente a la palabra "acrónimo" en castellano, es decir, es una palabra formada por otras dos y que toma el significado de ambas. Es genial porque hoy en día es una palabra estándar en inglés (acuñada por Carroll como decía), pero se trata de una palabra francesa en realidad, con otro significado (baúl de viaje), y que a su vez es un acrónimo ya que combina las palabras "port" (llevar) y "manteau" (paño, abrigo). Cuando la aprendí en inglés por casualidad hace un par de años e investigué su origen me pareció sensacional.

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